DESPEDIDA DE NUESTRA QUERIDÍSIMA MARI CARMEN

Ha llegado el final de curso, un curso atípico donde los haya, pero no solo el curso llega a su fin, también mi estancia como maestra en el CEIP Virgen de las Cruces de El Guijo. Hace ya cinco cursos que comencé una de las etapas más bonitas, no solo de mi carrera, también de mi vida.Llegaba a un cole nuevo, en un pueblo nuevo y con compañeros nuevos y, en este caso, el dicho de "más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer", no se cumplió. Ni en mis mejores sueños hubiese podido imaginar todo lo bueno que este bendito cole me iba a aportar. Desde las familias, que desde el primer día facilitaron mi tarea y me acogieron entre ellas; mis niños y niñas, a los que me llevo en mi corazón desde el primero a la última, todos y todas únicos y especiales; mis queridos voluntarios y voluntarias, de las que tanto he aprendido en cada tertulia, de su experiencia y cariño cada miércoles, o las personas mayores de la Residencia de Personas Mayores Santa Ana, los que en cada visita que les hemos hecho, nos han llenado el alma con su gratitud. También ha habido momentos tristes, de eso trata la vida, me refiero a la pérdida de nuestro querido Rafael, al que siempre llevaré en mis recuerdos... Y, ¡qué decir de mi querida amiga Marga, "alma mater" de este colegio!. Si tuviera que definirla, diría que es una de las mejores personas que he conocido y que siempre quisiera tener en mi vida. Todo este recorrido, llega a su fin y mi puesto ya no está en El Guijo, me traslado a mi pueblo, a Hinojosa y no quería dejar de despedirme, o mejor de deciros un "hasta pronto" y "Gracias por todo a la Comunidad Educativa del CEIP Virgen de las Cruces".